Me sorprende el revuelo suscitado por la detención
del ex Consejero de Gobernación de la Generalitat de Catalunya, Señor Jordi Ausàs…
Se le acusa de estar implicado en una trama ilegal
de contrabando de tabaco desde Andorra a territorio catalán. Su ingreso en
prisión le generó mucha tensión, estaba “muy tocado” según declaraciones de su
abogado. Comprensible…
Realmente es para quedarse tocado que se te derrumbe
el “negocio” (pregúntenles ustedes a los miles de empresarios que las pasan
moradas), cuesta mucho montar una infraestructura, buscar clientes y además
pretender sacar algún beneficio. El desespero es el compañero habitual de los “emprendedores”.
La iniciativa de este “patricio” era perfecta. Respondía
a una necesidad social, mantenía un suministro constante y además era capaz de
mantener precios bajos para facilitar el acceso de los ciudadanos al consumo…
¿Cómo es posible procesar a un preclaro activista
económico?. Muy al contrario, en su actividad “ilegal” ha demostrado una vía de
desarrollo económico. Podríamos decir que se trata de una vía de distribución
similar a Mercadona, “productos de
calidad a precios bajos”.
Gran mente la suya, envidiable su iniciativa,
reconozcámoslo.
El Señor Ausàs ha sabido regresar al sector privado
con éxito. Ha demostrado a la clase política la existencia de vida más allá de
sus poltronas. Se trata de un referente…
Eso sí, siguiendo su ejemplo, indiquemos a nuestros
gestores públicos las posibilidades del contrabando. A lo mejor, teniéndoles
mercadeando en la frontera, roban menos puertas adentro.
POLITICA ES MORAL
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