Sin tapujos…., somos tontos.
Durante mucho tiempo un capitalismo “paternalista” nos ha convencido de que todos éramos propietarios y por tanto clase media…
Esta leyenda se ha contado tan bien que nadie se ha dado cuenta de que el poder económico ha asaltado la entidad política que representa el estado moderno.
Mientras lucíamos viviendas (hipotecadas con los bancos), coches (propiedad de las financieras), una élite cada vez menor amasaba una riqueza cada vez mayor.
El estado ha muerto…, la ciudadanía está sometida, impotente y en manos de una clase política elegida y adiestrada para no cuestionar el poder de sus amos…
El sistema financiero se ha “soltado el pelo” y se ha pasado por el “arco del triunfo” toda la jurisdicción política. Ha conseguido no verse afectado por los controles propios del supuesto estado de derecho.
Objetivamente, los supuestos garantes de los derechos sociales han vendido su alma por los símbolos de poder, aunque estos estuviesen vacios de contenido…
Bueno.., llegados a este punto tan sólo nos queda batirnos. Si, luchar y creer en nuestra capacidad para hacerlo.
Parecemos dormidos y en realidad sucede que estamos asustados.
Si ahora no reaccionamos, de no hacer nada, de considerar que lo que debemos defender es nuestro coche, nuestro pisito…, acabaremos perdiéndolo todo: sanidad, educación, servicios sociales, el llamado estado del bienestar…
No pensemos en que ya reaccionaremos cuando la crisis “nos afecte”. ¡Por favor!, el enemigo ya está a las puertas…
La Reforma laboral no es el camino, el crédito a las empresas y autónomos era la vía para conseguir mantener el empleo existente y dar opciones de reconversión a los sectores de actividad.
El paro subirá, las PYMES cerrarán, las grandes corporaciones soltarán lastre para mantener sus beneficios y los bancos seguirán aumentando sus ganancias…
O despertamos o moriremos dentro una pesadilla.
POLITICA ES MORAL
Pues eso luchemos por conseguir ser dignos, sin que importe el continente, sino el contenido, luchemos por mostrarles a nuestros hijos que no importa cuanto tienes, sino hasta donde se puede llegar desde la nada...casualmente encontré esta entrada.
ResponderEliminarOjalá podamos mostrarles a los peques que nuestra lucha no fue en vano, ojalá.