lunes, 27 de febrero de 2012

DESAHUCIOS. LA PARADA,EL ABUELO Y CAJA DEL MEDITERRANEO.


Este es un caso real, cercano. Llamaremos María a esta ciudadana de Sant Andreu de la Barca (Barcelona). María me pidió que publicase su realidad y así lo hago. Comparto y nada he de añadir…
“En realidad, mi situación es común a muchas personas…, no soy la única.”
Tengo 42 años, estoy en paro y cerca de perder la vivienda en la que resido con mi hijo…
Hace tres años mi marido me abandonó. No ha cumplido con el acuerdo de separación. La pensión acordada no se ha liquidado nunca y la mitad del pago de la hipoteca que a él le corresponde, tampoco (he de decir que ahora lleva un año en paro).
Perdí mi empleo hace 18 meses, cumplimenté mis obligaciones mediante la prestación de desempleo (no cesé en la búsqueda de trabajo), lo poco que tenía ahorrado y la ayuda inestimable de mis hermanos…
Uno de ellos también perdió su trabajo y empezó la deriva…
Empecé a no poder pagar la letra de la hipoteca, hoy los impagos ascienden a casi 6.000 euros.
Intenté por todos los medios acordar fórmulas de pago a la entidad financiera. Resultó imposible…
Finalmente, entre mis hermanos y yo pactamos que iría a vivir a casa de mi padre y a cambio de cuidarle (padece alzeimer), viviría gracias a su pensión. Alquilaría mi piso y con ello podría pagar los plazos de la hipoteca y negociar con “garantías” la liquidación de la deuda (prorrateando el importe en varios meses).
A nuestra propuesta, el banco ha dicho no. Se nos exige el pago de los 6.000 € para poder seguir pagando los plazos “normales”…
Ya estoy a punto de ser “expulsada” del que ha sido nuestro hogar desde hace diez años…
Nunca he huido de mis compromisos, nunca escondí mi realidad, siempre busqué soluciones a la situación. Caja del Mediterráneo me aboca al caos y no queda otra que perder todo el fruto de mi esfuerzo y de los míos.
Agradezco que mi padre, a pesar de su situación, aún pueda ofrecernos a mi hijo y a mí un lugar en el que vivir. Agradezco a mis hermanos su generosidad y proclamo mi rabia ante una injusticia que no entiendo no haya provocado y provoque la respuesta de aquellos que se dicen mis representantes, los políticos.
Malditos sean, malditos. Siempre mirando a otro lado, siempre mintiendo.
POLITICA ES MORAL

No hay comentarios:

Publicar un comentario