miércoles, 23 de mayo de 2012

NI FE, NI ESPERANZA Y AHORA, CARIDAD TAMPOCO.



He tardado en reaccionar. No podía creer lo que en el informativo de hace dos noches escuche de la boca del Cardenal Antonio Rouco Varela, actual presidente de la Conferencia Episcopal Española.

Este “cristiano” insigne, ante la posibilidad de que que la Iglesia deba pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), amenazó con que esta medida “irá en detrimento de otras acciones”…

La pregunta subyace. ¿A qué otras acciones se refería?.

Pensé en reducciones en vestuario, en los ajustes en las reformas de iglesias, conventos, santuarios. En limitaciones a los viajes de “apostolado”, al cierre de escuelas confesionales…., nada más lejos de la realidad. Su mente privilegiada (no olvidemos que Rouco Varela también es presidente de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas), fue rápida a la hora de detectar el punto en el que empezar a meter tijera. Pronunció la palabra Cáritas…

Cáritas Diocesana ha sido y es un colectivo, que al margen de cuestiones de fe, trabaja la realidad del día a día social. Siempre ha estado en la trinchera a la que nunca ha bajado la curia que siempre ha vivido entre oros y púrpuras.

La Iglesia española ha prosperado cerrándose a la mayoría de los españoles y haciéndose “fuerte” en lobbys que le han mantenido cerca del poder y de los órganos de decisión. Así , la supuesta casa de todos se ha convertido en el reducto de una amplia minoría.

Pero todo colectivo dispone de individuos con conciencia que por encima de sectarismos siguen pensando en plural, con mente abierta y manteniendo el corazón limpio…

Conozco muy bien a muchos integrantes de Cáritas. Todos y cada uno de ellos resultan ser personas voluntariosas y constantes. Trabajadores que apoyándose en su fe particular, se dan a los demás al margen de confesión, raza u origen. Tan solo hacen de la caridad un arma infalible, siempre cargada de la fe que les da esperanza en que un día las cosas podrán ser mejores.

Su jefe, el Señor Rouco Varela, les amenaza con recortes…, que vamos a hacer, parece el pan de cada día. Eso sí, imagino que el que les repartan estará bendecido…

Cada vez estoy más en la línea de separar totalmente Iglesia y Estado. Seguiré yendo y misa y si se da el caso, ya colaboraré en la colecta para mantener a “mi” iglesia…

POLITICA ES MORAL

No hay comentarios:

Publicar un comentario