sábado, 15 de marzo de 2014

MARXISMO EN CAMISETA


Hace  dos veranos (lo recuerdo perfectamente), compartí mesa con unos amigos, entre ellos un  muchacho que no llegaba a la veintena y que vestia una camiseta estampada con una de las imágenes más conocidas de Karl Marx . Nada excepcional deberia suponer una indumentaria veraniega y lúdica, pero para mi sorpresa, el contertulio enfundado en la prenda de algodón era votante del Partido Popular.

No lean antagonismos antes de hora, nada me corresponde decir sobre ideologías, preferencias de voto u opciones partidistas. Uno tiene sus ideas y los demás las suyas, pero en aquella ocasión lo que me entristeció fue un pobre careto estampado, lo que me inquietó fue ver al pobre Marx convertido en un cromo y poco más. Marx y el marxismo, ¿donde quedan ya?...
El Marxismo se encumbró sobre la negación de lo que conocemos como socialismo utópico y estableció una praxis del mismo convirtiéndolo en “científico”. Planteó un mercado intervenido por el estado, abolir la propiedad privada y llegar de este modo al fin de las clases sociales. La historia, juez muy terca, nos ha demostrado que de aquella idea luminosa nada queda o casi nada. Sea la naturaleza humana, sea lo inadecuado de la aplicación de la teoria marxista, la cuestión es que una supuesta buena idea se quedó en una buena intención...
Karl Marx fue, sin lugar a dudas, un hombre que supo leer su tiempo y que en base a ello asumió el compromiso de cambiar la realidad. Teorizó sobre la justicia social y propuso formas de conseguirla.
Influido por Hegel que le aportó la dialéctica del materialismo y por Feuerbach que le llevó a la crítica de la religión, Marx contrapuso a esta el  ateismo antropológico  y la visión materialista de la historia, estableció que el hombre es hombre por si mismo y no por una supuesta esencia otorgada por un ser superior al que llamamos Dios.  Así, será la plena aceptación del ateismo la que llavará al ser humano a la libertad. El hombre, en su realidad material se convierte en hacedor de su propio destino. El pensamiento hegeliano incorporó al marxismo la indisociable comunión entre la  realidad y la razón, estableciendo así un pensamiento absoluto y único.
En resumen, denostada la religión “como el opio del pueblo” y sustentadora de las estructuras económicas que oprimen  a los grupos sociales más desfavorecidos,  Karl Marx establece el materialismo igualitario como método de acabar con la asimetria social y garantizar una organización humana igualitaria.
La demostración práctica de la teoria marxista no se cristalizó en las sociedades industriales occidentales, se dió inesperadamente en una sociedad mayoritariamente agrícola como la rusa. La Revolución Rusa de 1917 dio paso al bolchevismo y este a la práctica, estableció una nueva organización social atea pero otra vez socialmente  injusta. Cierto es que el marxismo, evolucionado al bolchevismo y finalmente asentado en el marasmo llamado comunismo, fué una fórmula de éxito exportable en oposición al capitalismo. En cualquier caso y durante muchas décadas, la Guerra Fria estableció una pugna entre dos modelos socio-económicos que a la postre, dado el fracaso de ambos, devuelven a la biblioteca al Señor Marx y a todos sus inspiradores y colaboradores (no quisiera omitir a Engels). Ahora son de obligada consulta pero ya no cuentan para examen...
El basto y valioso pensamiento marxista, fruto de la observación, la conciencia y la voluntad de un hombre con vocación para con su época, se ha convertido en un proceso de curiosa lectura: un diseñador con un PC Apple americano diseña un dibujo, el dibujo se estampa en una camiseta de algodón confeccionada en China, las camisetas las transporta un avión de librea india, se destribuyen para su venta en las tiendas de souvenirs pakistaníes de las ciudades europeas y las compra, para finalmente vestirlas, un votante del Partido Popular...
Recuerdo mirar a la camiseta del contertulio muchas veces. A pesar de lo grata que resultaba la comida, yo miraba a los ojos de Karl y este, creanmé, nunca se reia.

POLITICA ES MORAL

 

 

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