EL OCASO DE LA IDEOLOGIA

Hoy tenemos la impresión de atravesar un período de crisis ideológica que pone en cuestión las ideologías clásicas inspiradoras de las actuales formas de organización política.

Esta falta de consideración se produce a causa de la imposibilidad de nuestro sistema político para dar solución a gran parte de los problemas que pesan e inciden sobre la sensibilidad ciudadana.

Las ideas políticas pierden atractivo ya que el ciudadano advierte todo lo que en ellas hay de esquematismo vacío... A la política de ideas le ha sucedido una política de cosas y de hombres. Hemos descubierto que no se trabaja para la idea de interés común, sino que la idea es la institución (el poder y su perpetuación)...

La esperanza no es otra que este crepúsculo de nuestra clase política, sea el origen de nuevas formas de entender lo público, aquello que ha de ser de todos y que nos configure como una sociedad equitativa.

Necesitamos que la "ideología" de nuestros partidos sea capaz de alumbrar formas de concebir la organización de los ciudadanos, a partir de planteamientos que den paso a la aparición de nuevos valores, sobre los que asentar las razones de la existencia y organización social. 

POLITICA ES MORAL